viernes, 29 de mayo de 2009

Baby cat face


Ya conocéis a Miss Carrusel.
Os presentaré ahora a otra mujer,
ojos de felino y un gran corazón
en un mundo gobernado por el horror.

Esquerita le pusieron al nacer
pero todos la llamaban Baby cat face,
Baby cat face,
Baby cat face.

Toda la inmundicia de Nueva Orleans
fue más de lo que pudo soportar.
Grita una mañana “he de huir de aquí”.
La miseria humana no conoce fin.
Pero Baby no te puedes esconder,
sabes que es inútil Baby cat face,
Baby cat face,
Baby cat face.

Quiso apartarse del camino del mal,
hizo votos de silencio y castidad,
se unió al templo de la purificación,
de los bañados con la sangre del buen dios.
Lo dejo todo y se abrazó a la fe,
Y nació la hermana Baby cat face,
Baby cat face,
Baby cat face.

Nadie te avisó jamás
de lo dura que puede ser la verdad.

Una noche aciaga de sexo y alcohol,
desoyendo los dictados del señor,
un hombre culigordo que leía a Verlaine
la dejó preñada en un grasiento hotel.
Sucio putañero me vengaré,
gritaba entre sollozos Baby cat face,
Baby cat face,
Baby cat face.

Aquel tipo aprendió cuando un bendito caimán
entró en su cama y destrozó su yugular.
Baby ya vengada pudo dar a luz
a un bebé llamado Ángel de la Cruz,
que declamó en latín nada más nacer
mientras agarraba el pulgar de Baby cat face,
Baby cat face,
Baby cat face.

Una voz le dijo nada has de temer
y se arrojó al vacío desde un planta diez.
¿Quién la culpará por perder la razón
entre tanto odio y depravación?
Brillará una estrella y así sabréis
que allí nos contempla Baby cat face,
Baby cat face,
Baby cat face.

No, nadie te avisó jamás
de lo dura que puede ser la verdad.

No baby, no lo intentes comprender,
no vale la pena.

Baby cat face,
Baby cat face.

Nacho Vegas

jueves, 28 de mayo de 2009

Las manos dentro del agua


Sé que he sido un cobarde
sé que lo soy aun en la canción
pero ya es tarde y no logro encontrar
una manera mejor de explicarme.

Tú creías ser la más fuerte
creías ser la dueña del mar
pero al rodar por la arena ahora ves
que el mar no es tuyo y maldices tu suerte.

Con tu esmeralda y tus rosas
y tu melena color de miel
haciendo trucos de virgen de por aquí
(jamás creí en esa clase de cosas).

Y aunque no supe quererte
en días como hoy a veces pienso en ti
no creas que cometiste un error
como ya dije, no eras tan fuerte.

Y dime qué ves
cuando ves tu reflejo
dentro del agua.

Las manos dentro del agua
son garras que parecen temblar
yo te limpié, yo te dí de comer
yo descubrí esa línea en tu espalda.

Las manos dentro del agua.

Nacho Vegas

miércoles, 27 de mayo de 2009

Que nos parta un rayo


Existen cielos que yo jamás veré,
de blancas nubes con cuellos de cisne que parecen emerger
de la tierra como níveas flores.

Los he buscado de estación en estación,
llegué a Madrid, Nueva York y Estambul pero no llegué a una conclusión,
ya se han confirmado mis temores.

Que duelen las horas en la oscuridad,
que fumo diez mil cigarrillos que sé que mi voz quebrarán,
que rezo y voy dibujando en ceniza una cruz,
que súbitamente caiga un rayo y se haga la luz.

Me pregunto dónde estarás,
me pregunto por qué no estás aquí.

Si me haces falta hoy que una guerra va a estallar,
dicen son tiempos de paz, pero sólo es lo que algunos llaman paz,
y sé que niña tienes miedo.

Sé que lo tienes, sé que yo lo tengo
y sé que las noches sin ti son un infierno.

Y duelen las horas en la oscuridad,
y fumo diez mil cigarrillos y sé que mi voz quebrarán,
y rezo y voy dibujando en ceniza una cruz,
que súbitamente caiga un rayo y se haga la luz.

Y duelen las horas en la oscuridad,
y fumo diez mil cigarrillos y sé que mi voz quebrarán,
y duelen las horas y yo le rezo a mi Dios
que súbitamente un rayo nos parta a los dos,
que súbitamente un rayo nos mate a los dos,
que súbitamente un rayo nos fulmine a los dos.

Nacho Vegas.

martes, 26 de mayo de 2009

El peñón


E
l peñón
el peñón me muestra la boca
la boca, que es un reino;
el reino, que es un príncipe,
sin boca,
sin ojo muerto.

Sin nada que decir…

Salvo estás muerto,
bajo la lluvia de frazada
que abriga nuestros intestinos de papel maché
cuan
solo entre moluscos robot.

Por la inercia sonriente…

… Y pienso que soy dos, tres, cinco…

Y pienso que
me caigo,
me caigo, no me dejes

¿Qué acaso sólo puedo pintar con gris?
Como en un film noir

Me voy…

Hacia el agujero
que se forma
entre tu culpa
y la historia.


Por César Santivañez: Una noche de whiskey negro, una pipa maltratada por el tiempo y el hachís hermoso. Ese detalle que se imagina con tonos verde-marrón y se quema al fuego dejó éste pequeño escrito en mi poder. Especialmente dedicado.
Espero que la confianza no me castigue y que la vida nos siga juntando siempre.
Más de éste personaje extraño y algo extravagante en:
Pienso en Comics

lunes, 25 de mayo de 2009

El último hombre


Hay días en los que uno simplemente no es hombre.
No hay nubes ni mal que bien obre,
edificos inclinados con gente cayendo.
No importa, no duele, nada lúgubre
si padece lo hermoso o lo grotesco;
ni sentimiento, ni emoción en mí abre,
islas o mares, penínsulas o calles;
son lo mismo que odie o que ame,
son prescindibles mis manos y mis piernas,
mi garganta y mi sangre.

Un grito bajo el agua, un parto en la cocina.
Nada asusta, nada quema,
nada sueña ni respira,
nada es bello, nada es dorado.
Bello sería correr a casa,
con el cuello perforado por la voz que escapa,
que de censura sabe por los dientes que estampa.

Nada suena, nada calla,
nada dura, nada pasa.
Recuerda un despertar y lo que éste clama,
el color estornuda a los que huelen a esperanza...


(Interlunio) Líneas de un alma alejada un tanto de la humanidad que hoy en día espanta.
Un ser descabellado, amable y silencioso. ¿Para qué más? -Preguntaría Dodó.
Un amigo, un hermano, y si la vida apremia. Un compañero de noches incompletas cargadas de vino tinto o whiskey negro.

domingo, 24 de mayo de 2009

Creación


Ví caer a dios y no se levantó, nadaba entre el vómito del mundo antes de ser mundo y la luz universal. Dejó así los mares.
Él que siempre estuvo a mi derecha y a su derecha la sombra que sangró desde la madera hecha cruz para salvar al hombre antes de ser hombre.
Vi los pechos de su puta favorita entre la maleza que para el ser de dos patas se transforma en nubes. Sus amarillos dientes se regaron y se hicieron estrellas, constelaciones y otras deformidades.

En el páramo que sus manos ofrecían crecieron las hierbas y árboles, regados al caer la tarde por la lluvia que manchó a la mujer virgen, esa lluvia roja que bañaba al oscuro mundo.
Vi a dios quitar un hueso del ser perfecto y lo transformó en dos curvas y dos tetas, hundió su dedo en la entrepierna de la muñeca inventada y con ojos de malicia la llamó Lilit, al ver al hombre solo llamó a Eva que jugaba entretenida con la serpiente del ángel que yo liberé mientras él mordía su fruta prohibida.

Vi como la bilis que escupía se hacía tierra, y se separaron así las aguas, mientras el hombre coge la serpiente que crece en su cuerpo y la empotra en ése lugar que dios construyó con un dedo. Lilit celosa atrae a la serpiente que se cuela entre sus piernas y duerme en el espacio-humedad- que la mujer obsequia y se construye un reino.
Vi a dios molestarse con ellos, ofendido crece y me mira por sobre el hombro, yo sonrío y me limito a masturbarme con las manos de su único hijo.

Vi toda la creación formarse en un instante que dura dos eternidades, vi sus manos quebradas tratando de corregir lo inevitable.
Yo lo perforo con la lengua que se mueve en la boca de mi adorado Lucifer y le quito su poder.
'Lu' recoge su corona desde mis pies, mira a Eva y Adán, ríe al ver como el animal se une a otro animal, y empieza así la verdadera creación.

sábado, 23 de mayo de 2009

¿Defecto o imaginación?

Vaya amenaza de la vida que carcome toda piel la piel, he ahí que solamente somos corderos que entre lobos nos han mandado.
Vaya vulgardiad del asesinato al niño mientras tus manos masturban la absurda idea de la penetración, he aquí la luz divina del amor que quita la vida y la tapa con hojarasca y tierra negra.

¿Acaso tenemos algo en común? -Preguntó la puta menor.

Vaya intento de gozo en la boca que escupe toda palabra y semen espeso de animal, he aquí el detalle de la creación que destroza su sexo con un soplo de aire y calor.
Vaya idea de venderse al polvo por dinero y suciedad, he aquí la madre iglesia que es la casa del señor destinada al mejor postor.

¿Acaso tenemos algo en común? -Preguntó la puta menor.

Vaya semejanza en el espejo ordinario que al fijar dos tetas responden con 'amén', he aquí la fábula de "D"ios que no es otra cosa que la inquieta polución del violador cristiano.
Vaya instante en la pesadilla del ser que lastima al niño, lo consume y lo perfora, he aquí el odio a la creación humana por defecto o imaginación.

No, tú eres la puta y yo el pagador. -Respondió el niño mayor.

viernes, 22 de mayo de 2009

Veintidós (Instante dos)
















A la sombra de mi tan adorada Amélie.


La ví una noche de Enero, lo sé por que mis recuerdos están resecos.
La vida me ha quitado pequeños instantes, hoy tengo éstas manos, quizá mañana ya no tenga ni las de ella.
La ví otra noche de Marzo, lo sé por que mis pasos ya no existen.
La vida me ha quitado el suspiro menor, hoy tengo mi taza de frío café, quizá mañana ya no tenga ni el sabor amargo de sus palabras.
La ví una noche de Agosto, lo sé por que mis días están contados.
La vida me ha quitado el sustento mayor, hoy tengo sus fotos en dos colores, quizá mañana ya no tenga ni su recuerdo en los ojos. O tal vez mañana tenga aún el dulce sabor de sus gritos en besos que se pintan como el tango. Quizá... ¿Por qué no?

Desnudez
No hay redención sin pecado.
No hay justicia sin un culpable.
Es mi pecado la culpa de imaginar tu cuerpo desnudo...
Es verdad, estabas muerta. Pero me importaba tu desnudez solamente.

No hay muerte si antes no hay vida.
No hay muerte sin un cuerpo.
Es tu cuerpo muerto la razón de mi vida.
Es verdad, soy tu asesino. Pero juro que solamente me importaba tu desnudez.

A Cambalache, for sentimental reasons.

jueves, 21 de mayo de 2009

Oración


Padre nuestro que estás en los cielos, ruego por la dulce mujer de seis años. Padre nuestro que todo lo puedes, ruego por sus pechos marginados. Santa María, tal vez tú me comprendas. Tú que también fuiste ultrajada. Padre nuestro que perdona las ofensas, ruego por mis manos inquietas y húmedas. Padre nuestro que todo lo ve... ¿No la has visto desnuda también?

Sus piernas delgadas rompen mi mente pura y la transforma en algo más puro.
Sus curvas no formadas dejan el sabor del verso en mi lengua y me desmorono.

Padre nuestro que mi voluntad se haga sobre ella, Padre mío que cometiste el mismo amor. Padre nuestro que todo lo sabe, que muerda mi pan glorioso aquella niña. Santa María, tal vez tú me escuches. Tú que también fuiste obligada. Padre nuestro que todo crea, ruego por su sexo virgen sin entrar en ella. Padre nuestro que todo lo escucha... ¿No le has escuchado gemir también?

Sus ojos azules engañan al cielo y lo destruye. Quedan nubes rojas y vacías.
Sus labios definidos quitan todo milagro de las manos del santo y lo transforma en fluído.

Padre nuestro que en mi vientre escupe el celestial pecado blanco. Padre nuestro que maquillas el mundo con pan ázimo y sangre. Te lo suplico. Santa María, tal vez tú puedas servirme. Tú que también estás en mis plegarias. Padre nuestro que todo lo inventa, no me dejes caer en la tentación y purifica mi sexo con ella. Padre nuestro que me quita los amargos pechos de María... ¿No has eyaculado sobre ella también?

Abre la boca dulce niña María de ojos azules, he aquí el cuerpo de dios, comed.
Abre las piernas dulce niña María de pechos invisibles, he aquí la sangre del Señor, bebed.

miércoles, 20 de mayo de 2009

Mimo: El grito perfecto



















Imagen de
Mondragón (Retratos eternos)
"Lágrima de un tango"-Ciudad Paraíso.
Photo © 2009
Mondragón de Malatesta

Ella pintó su rostro con dos gramos de alegría, imaginó ser hierba sobre la risa y como brisa llegó.
El campo se viste con sus gestos cada vez que sus manos tocan la lluvia. La carne que creció de mi costado.
Ella juntó cada una de mis costillas y se las colgó como dientes para enseñarle una sonrisa al creador.
El momento se quema con sus cuentos cada vez que mis manos tocan sus huellas. El polvo que creció de su costado.
Ella dibujó una gota feliz con un gramo de mi tristeza, sus pasos dejaban parte de una caricia cada vez que yo negaba ser un hombre.

Ella, mi grito perfecto. Tal vez... ¿Por qué no?

*Mimo*

Habla demasiado y no dice nada,

Rayas dos colores,

Lunar lágrima cayendo de su mirada,

Labios mil sabores

-Mimo el momento callado.


No busca nada y halla todo,

Gestos tres detalles,

Sonrisa silenciosa y pétalo arrancado

Ingrata y tímida en las calles.

-Mimo la risa pintada.


Escribe pinturas y lee dibujos,

Mirada un suspiro

Regala momentos y quita abrazos

Lunar huella arrancado sin pedirlo.

-Mimo las blancas manos.


Pinta lecturas leyendo paisajes,

Palabra un gesto silencio,

Grita con las manos rotos viajes,

Caricia mal cosida sobre el trapecio.

-Mimo las botas cansadas.


Viste pasos hechos a mano,

Mudo encaje en los labios,

Lento el corazón usado,

Sucursal de viajes moribundos.

-Mimo el personaje perfecto.

martes, 19 de mayo de 2009

L.M.P.


Spiritual 1
.
Salí a la calle y no vi a nadie,
salí a la calle y no vi a nadie,
¡oh, Señor!, desciende por fin
porque en el Infierno ya no hay nadie.

Diario de un seductor.
No es tu sexo lo que en tu sexo busco
sino ensuciar tu alma:
desflorar
con todo el barro de la vida
lo que aún no ha vivido.

Bello es el incesto.
Bello es el incesto.
Hay torneo de lanzas, y juegos
y el vino promete su derrame
para alegrar la unión
de los esposos.
Se decapitará a dos niños para saber si es buena
la sangre, y si así augura
una feliz unión para los siglos.
Cándido, hermoso es el incesto.
Madre e hijo se ofrecen sus dos ramos
de lirios blancos y orquídeas, y en la boca
llevan ya el beso para desposarlo.
Y en la noche
de bodas, invitado
viene también el cielo: lluvia
y truenos
y los rayos, y el mundo entero convertido en lodo
para celebrar la unión
de los esposos.

Asesinato.

Cuando un hombre no nos deja vivir,
matarle es un acto en defensa propia.

En el obscuro jardín del manicomio


En el obscuro jardín del manicomio
los locos maldicen a los hombres
las ratas afloran a la Cloaca Superior
buscando el beso de los Dementes.

Un loco tocado de la maldición del cielo
canta humillado en una esquina
sus canciones hablan de ángeles y cosas
que cuestan la vida al ojo humano
la vida se pudre a sus pies como una rosa
y ya cerca de la tumba, pasa junto a él
una Princesa.

Los ángeles cabalgan a lomos de una tortuga
y el destino de los hombres es arrojar piedras a la rosa.
Mañana morirá otro loco:
de la sangre de sus ojos nadie sino la tumba
sabrá mañana nada.

El loquero sabe el sabor de mi orina
y yo el gusto de sus manos surcando mis mejillas
ello prueba que el destino de las ratas
es semejante al destino de los hombres.

A quien me leyere

Los libros caían sobre mi máscara (y donde había un rictus de viejo moribundo), y las palabras me azotaban y un remolino de gente gritaba contra los libros, así que los eché todos a la hoguera para que el fuego deshiciera las palabras...
Y salió un humo azul diciendo adiós a los libros y a mi mano que escribe: "Rumpete libros, ne rumpant anima vestra": que ardan, pues, los libros en los jardines y en los albañales y que se quemen mis versos sin salir de mis labios:
el único emperador es el emperador del helado, con su sonrisa tosca, que imita a la naturaleza y su olor a queso podrido y vinagre. Sus labios no hablan y ante esa mudez de asombro, caigo estático de rodillas, ante el cadáver de la poesía.

Leopoldo María Panero,
1/3/87

lunes, 18 de mayo de 2009

Tiempos morados


Imagino tus piernas envolviendo mi cuello, mientras mis besos crecen en tu sexo.
Imagino tus pechos en mis manos, mientras se hacen pequeños en mis labios.

Tengo el sabor de tu entrepierna en la garganta, como cuando se imagina el mar y sus olas golpean la roca.
Tengo tus costillas en mi existencia como cuando el campo crece en semillas de soledad y angustia.

Imagino el vodka entre mis vasos, gotas de naranja en tu espina dorsal mientras mi semen blanco dibuja un verso en tu boca.
Imagino las cartas españolas sobre tu vientre, mientras mis manos entran en tu sexo y humedecen mi instinto.

Tengo el sabor de tus besos como cuando se tiene el sabor de la mora en invierno.
Tengo tus manos enamoradas de las mías, como cuando se meten bajo tu falda y te ponen a temblar.

Imagino tu cuerpo sobre mis sábanas mientras mis piernas golpean las tuyas y tus cabellos se acomodan en tu espalda.
Imagino el escritorio marrón gritando mientras tus tetas se confudían con las oraciones de aquella mujer virgen.

Tengo el sabor de su sexo con el mío mientras el viento cambia de parecer.
Tengo el olor de tus gemidos entre la noche y el café negro.

Imagino el invierno y el terror al tiempo cuando la mora se acaba en tu boca y respira en tu vientre. Imagino otra vez que estás muerta, y es ahí que te hago el amor otra vez.

sábado, 16 de mayo de 2009

Mi muñeca favorita


Miró sus manos sobre mi espalda, sus ojos siempre fijos y oscuros parecían dos manchas que jamás se borrarían de mi cama.
Miró sus piernas siempre extendidas, sus tetas quietas con sabor plástico parecían dos globos que nunca se iban a romper.

Faye me quitó los gritos, me dejó tres fotos y se marchó.

Miró sus manos contra las mías, sus dedos mal trazados y sin uñas parecían los de un juguete de la infancia.
Miró sus pies sobre mi pecho, sus pasos sin vida y viejos parecían dos cosas que nunca me iban a dejar.

Faye llevó sus besos, dos libros, un viejo perfume y se alejó.

Miró sus labios tan gastados, limpié las gotas de ese líquido blanco que tanto le ofrecí, ese líquido que se confundía con hostias del señor.
Miró su entrepierna tan rota y humillada, mis dedos comían toda magia color piel que no tenía la costilla de Adán.

Faye me vio sobre ella, vomitó y lloró, tomó lo antes mencionado y la puerta cerró.


Nota: Inspirado en el personaje de Faye Wong en 'Chungking Express' (Faye)

viernes, 15 de mayo de 2009

El extranjero


Hoy mientras escuchaba hablar a ese hombre gastado por el tiempo, de canas marcadas por la vida, de brazos bien trazados y pequeña estatura. Me di cuenta de lo mucho que queda por hacer.
Le escuché hablar de un Perú con futuro, un Perú que lo tenía todo, ese Perú que hoy en día se ha perdido gracias a las multinacionales que se llevan toda 'nuestra' riqueza.
Vivimos encerrados entre las fronteras que acortan libertad y nos quitan el sueño de correr un poco más. Vivimos mecanizados en: Estudiar, trabajar, morir. Sin darnos cuenta que lo más importante es algo muy distinto a todo eso.
Lo escuchaba hablar con aires de nacionalista sobre Velasco, que obviamente, olvidando los errores que pudo haber cometido como: "La reforma agraria", la crisis pesquera (Aunque él no haya tenido nada que ver con la desaparición de la anchoveta) así como la inflación y demás etcéteras.

Chile pudo temblar ante los pasos 'algo soviéticos' de un lejano Perú , y no como es ahora.
El mismo Pinochet lo declaró: "si Perú atacaba Chile en 1975, el país habría sufrido una quiebra finaciera; y el ejército peruano habría penetrado hasta Copiapó"
Lamentablemente tuvimos a un traicionero hijo de la gran... (Ya que estamos en el mes de la madre evitaré todo comentario respecto a eso) lamentablemente fue así, Bermúdez nos quitó ese sueño que hasta ahora tenenemos muchos peruanos. No llegar hasta Copiapó, pero suficiente con haber pisado el Morro que podemos ver desde las costas de Tacna la heroica.

Y quitarles esa risa burlona que tienen la mayoría de chilenos que más parece ser una mueca exagerada y en exceso usada contra nosotros por la derrota que nos tocó saborear.
Y ya que los peruanos siempre pedimos un poco más, no bastó con llevarse a Velasco para que lo 'interroguen' luego que su mano derecha lo haya traicionado, si no que lo regresaran tarado y amputado. Como dije, estas fronteras nos quitan hasta las ganas de correr. Perdón, fue por un 'aneurisma aórtico abdominal', que debido a una gangrena tuvieron que amputarle la pierna derecha. (El poder del fuerte sobre el poder del más débil)
Los cielos peruanos pertenecen a Chile, la costa peruana y su mercado le pertenecen a Chile, las super tiendas y grandes farmacias, las grandes empresas hoy, pertecenen a Chile y todo esto es manejado por capitales Norteamericanos. Como si todo hubiera sido planeado desde el inicio, como un plan perfecto, trazado a medida como un buen traje de etiqueta.

Luego de abrirme los ojos con emocionantes palabras le escuché decir a ese agitado hombre:

No te sientas peruano por haber nacido aquí, nacimos aquí; es verdad, pero somos hombres del mundo. Con ganas de nadar en un mar y no un pozo.

Todo lo que aprendemos es para vivir siguiendo la línea que nos han impuesto. El hombre pequeño obedece al más grande. Yo nací en un Perú que alguna vez fue magnífico, pero hoy soy un hombre de mundo, un extranjero en cada casa. Así como nuestro Perú hijo mío. Que es extranjero en su propia tierra.

Nota: Esta parte está muy alejada de lo que se suponía escribiría en mi Blog. No tengo corazón nacionalista ni mucho menos, no guardo rencor a nuestro país hermano (Chile) ni nada parecido. Solamente era un grito desesperado a la vida. Con un claro ejemplo de lo que alguna vez pasó aquí en 'nuestro' Perú y de como ese señor de canas angustiadas trataba de hacerme entender, esas cosas que un viejo cree saber y de esa vida que el supo y sabe vivir. Espero no haber ofendido ni molestado a nadie.

jueves, 14 de mayo de 2009

Hotel dulce hogar


A la maldita mujer de Don Bosco, que nunca usó mallas bajo la falda.
A la putita del bar de la esquina, a Jimena, a Baltazar, a la albina y sus pezones con sabor a garnacha blanca.
A la dama de vestido negro cual hedoné desmedida y sin corazón.
A la Lupe que no era una de mis Tres Gracias ni mucho menos, a las tres peluqueras de escote y sus ayudantes de grandes pies.

A la pequeña cholita peruana, arañada y ajustada, a las grandes morochas que subían del norte.
A la negra insaciable y sus tetas chocolate, a la chinita Li y su entrepierna sabor a mar intenso.
A la rubia de bote y su diario carmesí, a Salomé y a Martina con su ojo color verde marihuana que más parecía un pedacito de esmeralda bajo la luz del neón.
A las caderas de Eva y sus treintaidós cortes en la mejilla derecha, a la baraja española de Matilde y sus sábanas rosa pastel.

A las dulces curvas de la loca Marilyn, a la estúpida rubia natural de boca profunda, a los cantos de Lucía y su gemela lesbiana e inmadura.
A las cuatro leonas del bar del centro, a sus melenas casi rojas con olor a perfume barato.
A los tequilas dorados y margaritas de Don Bosco, a su maldita mujer una vez más y mientras pido otro tequila la veo subir las escaleras con Raquelita la llorona.
A la vieja Rocío y sus consoladores angustiados, a la torpe y no tan bonita Sofía, que tenía ocho aros en el cuerpo: Uno en cada oreja, uno en la nariz, otro en el ombligo, uno por cada pezón, en la lengua un metal sabroso, pero si querías tenerlo todo, al quitarle las bragas verías el cielo más plateado de todos los cielos de aquella casona llena de princesas sin príncipe.

A la loca Maruja y sus gemidos en noches de aromas rojos.
A mis putonas favoritas, a las damas putas de mi hotel dulce hogar... Un brindis.

sábado, 9 de mayo de 2009

Naranja


La luna corre su lápida de labios magullados, un destello imaginado sobre la falda muerta.

La noche se prende con lágrimas felices, como gorrión asesinado grita la piel al desprenderse.
Enigmático, colosal, dimensiones brutas del cráneo al caer por encima de todo lo recreado en verso.
La luna rompe su ataúd de plata y sangra por un lado mientras yo recojo plegarias de la perra más fiel.
La noche regresa como alhaja quemada, remojada en barro y excremento de animal.
Es el gato muerto el color perfecto, como el viento sobre la columna de tu espalda que rasga el interior de mi vientre podrido.
La luna regresa su aliento muerto mientras la simple flor de mora crece desmedida.

Cae el hombre, cae la noche, se prenden los puticlubs de sofás naranja entre putas y chispazos de hombre viejo.

El sexo, el sabor amargo de tus pezones marrones imaginados como luna, son solamente las dimensiones de una vida mal asegurada...

martes, 5 de mayo de 2009

Tengo una novia que regala besos


La rubia melena de mi leona perfecta, la dama pintada por las manos de un comediante cualquiera.
Tenía más nombres que un Picasso y un Diego Rivera juntos.
No le hicieron una casa azul como a Frida, tampoco se derretía como el tiempo en las pinturas de Dalí. Traía dos tetas perfectas, seis dientes y los pies desnudos.
Cada tarde se dejaba ver por el sol para que éste dore sus cabellos un poco más.
La novia que nadie podría tener, la niña mujer que motiva la desnudez sobre un libro viejo.
Su cabello en estado salvaje derretía el semen de los viejos del pueblo, la novia que nadie quería tener, quizá una noche, o dos, tal vez tres por ser romántico, más de ahí, no.
Ella comía de la boca de cualquiera, reía como gaviota que escapa a las olas, la dama de todos, mi novia.
Unos dicen que llegó de Francia, otros cuentan que vino del norte, solamente yo sé que escapó de un lugar lejano para ser la princesa de todos los hombres burdos.
Era la Maja puta de los burdeles de bajo precio; los palacios de cristal de los pobres, mi novia.
Bebía vino blanco de la boca de cualquiera, luego me miraba y tocando sus tetas me incitaba.
Una balada casada con otro portero, quizá con el cartero que jamás trajo nada, dos gestos cuando alguien la sacaba a bailar para luego regalarle dos caricias, una por ojo.
Perinet sobre sus piernas si alguien quería contarle los pasos desde el vientre hasta los callos de sus pequeños pies, para luego estrellar en su boca ese extraño vino blanco con sabor a hombre.
Era la tristeza de los caballos rotos, la guerra que jamás empieza, una maldita huella en el mundo rosado. Quizá una mancha en la cama de la virginidad. Mi novia.

No creía que algo superior sopló su existencia, jamás visitó una casa para pecadores. Decía que más puta era "D"ios por que cobraba más que cualquiera. Luego reía dos veces.
Desde el cristal la miré mil veces y mil veces me regaló migajas que luego yo recogí desde su boca, ese sabor a hombre que se confundía con el vino blanco me destrozaba el alma y jamás le desprecié nada. La amaba como a nadie jamás adoré, tal vez...
Mi novia...

lunes, 4 de mayo de 2009

Belleza natural


Ella escupe el alimento y se ve hermosa, ella cuenta sus costillas en el espejo y se ve grandiosa.
Un minuto después se humilla, se castiga, vuelve a probar el postre de la abuela.
La mujer esqueleto se viste de pieles y cuenta los cabellos que se le caen sobre la tina perfumada.
Hermosa se levanta y más tarde pisotea el hambre vomitando lo poco que queda de ella.

(Relata el Zorro)
Rajaron mis labios con la fuerza de un mazo, mis colmillos se contaban como piedras en el suelo.
La perfecta mano del ser que camina en dos patas me quitó la dulzura que la naturaleza me regaló.
Golpearon mi cabeza contra la tierra que tanto me vio caminar hermoso, único.
Él puso su pie sobre mi cuello mientras mi lengua rozaba la arena seca.
La gloriosa idea de belleza sobre la mujer esqueleto me quitó lo que tanto tiempo llevé...
Ahora ella se ve hermosa, única.

Ella escupe el placer luego de haberlo saboreado, lo aleja después y éste no se expande.
Se ve en el espejo, respira y se eleva completa. Al llegar a sus piernas se humilla nuevamente, se araña la cabeza, escupe lo poco que queda de ella una vez más.
Su garganta quemada ya no siente nada, su lengua pierde el sabor, la sangre es distinta al mezclarse con su mal aliento y sus ojos amarillos hacen juego con el color del zorro.

La mujer esqueleto respira bajo la piel que le otorga la belleza natural que ella misma se ha quitado...