Aspiro la mierda que es dios y la mentira que es satán. Tengo tu perfume en mi mano derecha y con la otra corto ese aroma con rojo.
Aspiro la porquería que es dios y el engaño que es satán. Tengo tu recuerdo en mi segunda cabeza y con la otra corto ese instante con rojo.
En mi nariz despiertan dos gramos de hombre blanco mientras le quito el soplido de dios.
En mi piel duermen dos gramos de hombre marrón mientras le quito el pecado de satán.
Aspiro el asco que es dios y la falsedad que es satán. Tengo tu figura sobre la catedral de mi cama y con mi saliva borro tus tetas.
Aspiro el vómito que es dios y la trola que es satán. Tengo tu imagen bajo la puta que yace sobre el parqué y dibujo tu sexo en su cuerpo con dos dedos.
En mi pulmón rompe el soplido del hombre verde mientras le quito parte del suelo azul.
En mi lengua derrite su viaje psicodélico el hombre luz mientras le quito su falsa semejanza.
Aspiro tu recuerdo como polvo que eres, aspiro tu recuerdo y me olvido quien eres. Quizá mi segunda puta favorita, ya que al final tú ya estabas muerta...
Dedicado a la loca señorita que deslumbró mi sexo tantas veces.
Aspiro la porquería que es dios y el engaño que es satán. Tengo tu recuerdo en mi segunda cabeza y con la otra corto ese instante con rojo.
En mi nariz despiertan dos gramos de hombre blanco mientras le quito el soplido de dios.
En mi piel duermen dos gramos de hombre marrón mientras le quito el pecado de satán.
Aspiro el asco que es dios y la falsedad que es satán. Tengo tu figura sobre la catedral de mi cama y con mi saliva borro tus tetas.
Aspiro el vómito que es dios y la trola que es satán. Tengo tu imagen bajo la puta que yace sobre el parqué y dibujo tu sexo en su cuerpo con dos dedos.
En mi pulmón rompe el soplido del hombre verde mientras le quito parte del suelo azul.
En mi lengua derrite su viaje psicodélico el hombre luz mientras le quito su falsa semejanza.
Aspiro tu recuerdo como polvo que eres, aspiro tu recuerdo y me olvido quien eres. Quizá mi segunda puta favorita, ya que al final tú ya estabas muerta...
Dedicado a la loca señorita que deslumbró mi sexo tantas veces.
Hafid querido... Tienes la culpa de que me haya provocado escuchar a Bunbury después de bastante tiempo.
ResponderEliminarNo hay que extraviar el camino, a ver cuándo nos juntamos... Este fin de semana? Vemos una película extraña y la seguimos con música igual de extraña y por cierto siempre elegante... César tiene todo Nick Cave, o sea la felicidad perfecta, aunque también podemos amenizar con Diamanda Galas.
Besote
Un vino mi adorable Leny es lo que se ha ganado por comentar en primer lugar mi Blog.
ResponderEliminarPor escuchar a Bunbury un abrazo.
Espero verte este fin de semana. Tengo soledades desmedidas que contar, vino que tomar y lo mejor de todo. Tu cuerpo entero para acompañar.
Besote.
Gracias por el vino, Hafid! Esta vez no le daremos la botella a César para que la descorche (aunque nos haga reir, se desperdicia mucho, ja)
ResponderEliminarEste fin es perfecto para nosotros, así que ya quedamos... No nos plantes como el gato techero que eres, eh.
Besote